El autosabotaje es más común de lo que piensas.
El primer paso para el éxito es salirse de su propio camino. Con demasiada frecuencia, permitimos que nuestras inseguridades y miedos atenúen nuestra luz, convenciéndonos de que no merecemos brillar por una u otra razón.
Siga estos consejos principales para silenciar las dudas, deje las excusas y conviértase en su mejor yo.
Cómo poner fin al autosabotaje y alcanzar el éxito
1. Ten un plan
Simplemente lo estás improvisando: todo, desde tus objetivos de acondicionamiento físico hasta tus aspiraciones profesionales, hasta lo que cenarás esta noche o te pondrás mañana. Como lo que les digo a mis clientes: “Cuando dejas tu éxito al azar, es probable que no tengas mucho éxito”.
Termine con el autosabotaje: Consiga un diario y escriba sus metas. Asegúrese de que sean INTELIGENTES y regístrelos regularmente.
2. Siga el programa el tiempo suficiente para ver resultados
Lo que haces todos los días es más importante que lo que haces de vez en cuando. Lo que puede parecer que llevará toda una vida lograrlo, podría estar a la vuelta de la esquina. Pero si te rindes o te saboteas a ti mismo, nunca sabrás si fue solo un día.
Terminar con el autosabotaje: no se deje abrumar. Haz cosas pequeñas regularmente que te lleven al éxito a largo plazo. Fije una fecha para verificar con usted mismo su progreso. Hasta ese día, revisa tu progreso. Planee mantenerse constante.
Si planea ir al gimnasio durante tres horas cada semana, por ejemplo, debe comprometerse con esa meta hasta esa fecha en el futuro. Una vez que llegue a esa fecha límite, elija otra fecha y así sucesivamente.
3. Ten una actitud positiva
¡La actitud lo es todo! Una actitud negativa se interpone no solo en el camino de ver el lado bueno de las situaciones difíciles, sino también en dar saltos de fe. Cuando te convences de que algo es demasiado difícil o solo para personas más inteligentes que tú, dejas de correr riesgos.
Termine con el autosabotaje: piense positivamente y no se castigue por sus defectos. Cuando algo malo sucede, encuentra lo positivo en ello. No ganarás todas las batallas, pero aprenderás algo de cada una para ayudarte a seguir adelante.
Aquí hay un buen ejemplo:
Una de mis amigas perdió su trabajo y estaba realmente deprimida porque pensó que su contrato de trabajo estaba por renovarse. En el poco tiempo que trabajó allí, incluso obtuvo un ascenso. Así que no hace falta decir que el despido la tomó por sorpresa. Le dije que se mantuviera positiva y le aseguré que una mejor posición estaba a la vuelta de la esquina.
¡Ese despido la puso a disposición para un puesto aún mejor!
¡Su nueva oficina está en la ciudad y le encanta! La nueva oficina tiene un gran gimnasio donde hace ejercicio durante el almuerzo, lo que le permite pasar las tardes con sus tres hijos pequeños y su esposo. También le encanta estar en el centro de DC porque puede caminar, lo que la ha vuelto más activa.
Incluso con un despido repentino, salió algo positivo.
4. Conéctate emocionalmente con las metas que te propongas
Establecer metas por el simple hecho de tener metas significa que no estás conectado emocionalmente para lograrlas. Sin ese proverbial deseo ardiente, tiendes a no tomarlos en serio.
Veo esto mucho en mis clientes. Muchos de ellos quieren perder peso, pero el objetivo real es más profundo que eso y va más allá de su apariencia física. Una vez que encuentran la razón emocional detrás de sus objetivos de fitness, aumenta su compromiso y motivación.
Termine con el autosabotaje: profundice al establecer metas y hágase las preguntas difíciles.
¿Qué significará perder esas últimas 10 libras para su confianza? ¿Qué tipo de ejemplo quiere dar a sus hijos a través de su dedicación a su educación o estado físico?
¿Qué es algo en lo que no puedes dejar de pensar y qué necesitas hacer para lograrlo? ¿Qué significará una vez que alcances ese objetivo?
5. Hablar en términos definidos
“Trataré de hacer ejercicio esta semana”.
“Espero tener tiempo para preparar la comida este fin de semana”.
“Podría llegar a Yoga”.
¿Alguna de estas afirmaciones te suena familiar? Cuando hablas en términos condicionales, inmediatamente te das la opción de fallar. La conversación condicional le da un margen de maniobra al no responsabilizarlo por sus objetivos.
Si perder ese “peso de bebé” es uno de sus objetivos, posiblemente tratar de ver si puede ir al gimnasio prolonga sus posibilidades de alcanzar ese objetivo.
Termine con el autosabotaje: sea definitivo en su discurso y ponga sus objetivos en papel.
¿Estás listo para acabar con el autosabotaje?
Sea claro en sus objetivos. Conozca la razón detrás de ellos. Comprometer el 100 por ciento de su energía y esfuerzo en ellos. Solo entonces podrás ver el verdadero éxito por ti mismo.